El peque seguía enfermo y yo, que ya venía resfriada desde hacía dos semanas, estaba agotada.
Mi hermana decidió que lo mejor era que pasáramos el día en casa descansando.
Fuimos al supermercado para cocinarles una lasaña casera y tomamos el día con calma.
Nos quedamos espantados de los precios de los productos en EEUU. Estamos acostumbrados a los precios de España, y cuando fuimos allí, comprobamos que cualquier cosa que compres vale fácilmente el triple (carne, huevos, leche…)
A la tarde, como aparentemente el peque se encontraba mejor, salimos.
Mi hermana nos llevó a Merrick Park. Un centro comercial de lujo completamente al aire libre.
Estaba decorado con un enorme árbol de Navidad.
Después fuimos a dar un paseo en coche por Coral Gables, esperando encontrar casas iluminadas de forma espectacular, pero lo cierto es que eran todas muy muy normales, sin nada que destacar.
Para cenar volvimos a casa.
Por la noche el peque tuvo de nuevo fiebre muy alta.
Si os ha gustado la entrada y os ha sido útil para organizar vuestro plan, agradecería mucho vuestra ayuda para el mantenimiento del blog.
MIL PLANES 