ZAHARA DE LA SIERRA
Zahara está declarada desde 1983 Conjunto Histórico Artístico, justificado por su rico pasado, que se evidencia en sus monumentos, en el entramado urbano de sus calles con sus casas tradicionales, en su historia y en su herencia cultural.
El pueblo de Zahara presenta una tipología popular: el emplazamiento a lo largo de una inclinada ladera ha configurado a Zahara hoy día con un peculiar entramado urbano, producto de las irregularidades del terreno. Un terreno que obliga a las calles a escalonarse de tal manera que, paseando entre ellas, o bien se nos cierra la vista o se convierten en amplios miradores.
Como la mayoría de los pueblos, sus calles son muy estrechas y empinadas, por lo que os recomiendo dejar el coche a la entrada del pueblo. Nosotros lo dejamos en estas coordenadas: 36.840157,-5.392835, una calle con mucho aparcamiento.
Lo ideal es comenzar la visita yendo a la oficina de turismo. Allí una amable chica nos explicó lo más destacable a visitar. Sorprendentemente, y a pesar de ser las 9 y poco de la mañana de un sábado, estaba abierta.
Nada más bajar, el olor a churros nos despierta una enorme gula, así que preguntamos a la chica de la oficina de turismo dónde los venden. Un pequeño mercado donde hay una frutería, una carnicería… y un asador – churrería. El lugar se llama Mercado de Abastos y se encuentra en Calle Ronda, muy cerca de la Alameda de Lepanto. Os recomiendo si vais allí, probar sus churros. No son como los que conocemos en Málaga, ya que son muchos más esponjosos pero están muy buenos.
Salimos con nuestros churros en la mano, y visitamos la Alameda de Lepanto. Una gran plaza situada bajo la torre homenaje del castillo y con unas bonitas vistas.
Continuamos la visita bajando por calle Ronda y llegamos a la Ermita San Juan Dios de Letrán.
Es una pequeña iglesia construida en 1958, sobre el solar que ocupó la anterior ermita del mismo nombre.
De una sola y amplia nave, su portada es un amplio arco de medio punto coronado por tres espadañas, que cobijan a campanas fundidas del mismo año de la construcción templo.
Normalmente en casi todas las iglesias encontramos algo que nos llama mucho la atención; en este caso, fue el cuadro con la imagen del papa Juan Pablo II hecho en punto de cruz.
Os dejo fotos de las imágenes que posee.
Su horario de visita es de 9:00 a 12:30.
Adosada a la ermita de San Juan de Letrán y como único resto de la antigua ermita, se erige la popular Torre del Reloj, que constituía el campanario.
Toma el actual apelativo por la instalación a principios de siglo de un reloj de péndulo en su planta superior.
Continuamos la visita y llegamos a la Iglesia Santa María de la Mesa.
Fue terminada en 1755 bajo la dirección del escultor arquitecto Antonio Matías de Figueroa, aprovechando muchos de los materiales de la antigua ermita llamada de San Francisco, que hasta 1731 ocupó ese mismo solar, dando paso así a la que hoy contemplamos.
Del exterior destaca la fachada principal. Presenta portada barroca de mármol rosa cuyo remate coincide con la corona en bisel curvo que cubre el frente de la nave central. Es obra del maestro de fábricas Diego Pérez de Acevedo. Existe una segunda entrada llamada la Puerta del Perdón; está rematada con frontón curvo.
En la oficina de turismo preguntamos por el horario de visita y nos dijo que sólo abren para misas, así que no pudimos verla por dentro.
La iglesia se encuentra en la Plaza del Rey, donde hay un mirador en el que disfrutar de unas preciosas vistas del embalse.
Subiendo por el lateral de la iglesia ponemos rumbo a los Restos de la Antigua Iglesia Mayor.
Actualmente lo único resaltable es la torre construida de aparejo irregular con hiladas de ladrillo a diferentes alturas. Sobresalen los contrafuertes para su sustentación, situados en cada vértice del hexágono, y en cada una de sus caras son evidentes los mechinales cuadrados. La que actualmente vemos, por su estructura, construcción y uso, debió pertenecer al siglo XV y formó parte de la Iglesia Mayor edificada por los cristianos después de la primera conquista de Zahara en 1407.
Queda por ver si ocupa el lugar que previamente tendría la mezquita, en tanto en cuanto al haber un asentamiento permanentemente musulmán sería lógica su existencia, y como ocurre en otras ciudades conquistadas por el catolicismo durante la Edad Media, las iglesias se emplazarían sobre las antiguas mezquitas.
Actualmente ha sido restaurada parcialmente como centro de interpretación e información de las excavaciones e intervenciones arqueológicas llevadas a cabo en la Villa Medieval. Al preguntar por su horario en la oficina de turismo nos dijeron que es de 11:00 a 14:00, pero que los días que llueve, como la empinada cuesta para llegar al centro resbala mucho, no abren. Nos dejó a cuadros… pero así fue: no abrió, así que sólo lo pudimos verlo por fuera.
El camino para subir a visitar los Restos del Castillo y la Torre del Homenaje es una auténtica maravilla. Hay que avisar que en días de lluvia como el que nos tocó, el sendero de piedras resbala muchísimo, pero merece la pena de sobra.
La subida es bastante empinada, pero mientras más subimos, mejores son las vistas.
La serpenteante carretera para llegar a Zahara es una preciosidad, y como vemos, ideal para hacer en moto, aunque a éstos les pilló una buena mojada por el camino.
Son pocos los restos que quedan de la antigua villa medieval de Zahara para que podamos hacernos una idea de lo que fue su aspecto original. No en vano, todo el poblado estaba rodeado por un cordón defensivo constituido por lienzos de muralla con torres de trecho en trecho, estando todo el conjunto almenado; e incluso en varios lugares defendido por dos murallas.
El lienzo de muralla mejor conservado queda en la zona oriental. Del conjunto defensivo originario, lo que hoy llama más la atención, por ser lo único conservado, es la Torre del Homenaje, situada en el punto neurálgico del castillo y en su cota más alta está a 605 metros sobre el nivel del mar. El exterior, adaptado al terreno, presenta una planta prácticamente cuadrada (12 x 12,60 metros) y ángulos redondeados, producto de la asimilación de la arquitectura militar nazarí con la cristiana, como ocurre en el caso de la cercana Olvera.
El interior de ambas plantas se encuentra dividido en cuatro compartimentos cada una, mediante arcos rebajados que se entrecruzan para formar dichos espacios, y que se cubren, a su vez, por bóvedas vaídas.
En la cámara baja, por donde actualmente se entra, no hay nada de luz, por lo que os recomiendo tirar de linterna del móvil.
De la primera planta destaca la chimenea, de tradición cristiana, y dos ventanas de grandes proporciones, situadas antagónicamente.
La comunicación de las plantas se realiza mediante escaleras abovedadas construidas en el interior.
La Torre del Homenaje se resume en sí como una edificación partícipe, y a la vez, individualizada del castillo: cumplía la función de ser el último reducto donde refugiarse en caso de que hubiera caído el resto de la villa, con la esperanza, por parte de los sitiados, de que una ayuda venida del exterior o una paz negociada les permitiera seguir con vida.
La bajada decidimos hacerla por un camino de pasarelas que se ve desde la torre, y no por el mismo sitio por el que subimos.
Y este camino es aún más bonito que el de subida.
Os recomiendo pasear por las calles de este pueblo, ya que podéis encontrar rincones con mucho encanto.
Finalizamos la visita, de aproximadamente una hora y media, en un mirador que se encuentra a la entrada del pueblo, en estas coordenadas: 36.842632,-5.393121.
Si vais un día donde no os llueva, la foto del pueblo os quedará más bonita seguro, pero aún así sorprende ver la orografía del terreno donde se encuentra el pueblo.
Para ver más fotos, pinchar aquí.
Para descargar el plano del Zahara de la Sierra, pinchar aquí.
ARCOS DE LA FRONTERA
Pasamos de un pequeño pueblo con encanto como Zahara de la Sierra, a un pueblo – ciudad como Arcos de la Frontera.
Entrar en el centro es una locura, así que aparcamos a las afueras, aunque tuvimos que andar unos 15-20 minutos para llegar al centro histórico. Dejamos el coche aquí: 36.755298,-5.820238.
Camino al centro encontramos un colegio de la Salle, como la famosa canción de los Mojinos Escocíos.
Poco después llegamos a la Iglesia de San Francisco. La encontramos abierta por la celebración de un bautizo.
Como primera construcción, fue la ermita de San Antonio, hasta que la duquesa de Arcos funda el Convento de Franciscanos en el S. XVI.
Tras la desamortización, quedó la iglesia de una sola nave central con crucero y rematada con una cúpula de media naranja.
En el interior de la misma podemos destacar el zócalo de azulejos de la Escuela Sevillana del S. XV, la imagen de la Purísima del S. XVIII (Altar Mayor) y el relieve de la Capilla de las Ánimas, atribuido a Pedro Roldán.
Como curiosidad en esta iglesia, nos llamó la atención la imagen de una monja: Santa Ángela de la Cruz. Al ver la pequeña figura nos pareció una mujer poco agraciada; sin embargo, un lector de nuestro blog (Miguel Ángel) nos comentó que de joven no era fea. Buscamos información, y ciertamente de niña era una chica normal, e incluso mona; está claro que la figurita no le hace demasiada justicia, y la verruga la afeaba de mayor.
Subimos por calle Granadillos y llegamos a la Iglesia de San Miguel.
Antigua fortaleza árabe hasta mediados del S. XV que la transformaron en ermita. Fue, además, iglesia y hospicio de niñas huérfanas. Actualmente está cerrada al culto, se utiliza como salón de exposiciones y conferencias.
El horario teórico de visitas es el que especifico, aunque nosotros lo encontramos cerrado un sábado a las 11:30:
Horario de visitas: lunes a sábados, de 10:30 a 13:30 y de 17:00 a 20:00 (invierno) / de 18:00 a 21:00 (verano). Sábados tarde, domingos y festivos: cerrado.
Pósito.
Fue almacén de trigo en el S. XVIII. Hermosa fachada en piedra de 1738. Actualmente es un Centro de Salud.
Hospital San Juan de Dios.
Se crea como hospital de San Sebastián en el S. XVI y, a finales de este mismo siglo, todos los hospitales existentes en Arcos en esos momentos se refunden en él. De su iglesia barroca destaca el retablo Mayor de pino de Flandes sin dorar, la imagen del Cristo de la Vera Cruz (1545) y la de Ntra. Sra. de la Antigua. Actualmente es un Centro Residencial para Personas Mayores.
Pasamos por debajo de los arbotantes de la Basílica que forman el callejón de las monjas, una de las calles más bonitas del pueblo.
Justo en esta calle está el Convento de la Encarnación.
Fue capilla, hospital y cofradía en el S.XVI. Se funda como convento en la primera mitad del S.XVI siendo obra de D. Alonso de Baena. La portada principal es plateresca y la contigua gótica – florida.
Si giramos llegaremos a la plaza del Cabildo, la principal, en cuanto a monumentos se refiere, del pueblo.
Allí encontramos la Iglesia – Basílica de Santa María.
Iglesia Mayor, Insigne y Principal de Arcos, título concedido por el Sacro Tribunal de la Rota Romana en 1764, dando fin al litigio que mantenía con la de San Pedro. En 1993 recibió el de Basílica Menor.
Sus primeras construcciones datan de los siglos XIII y XIV, sobre los restos de la antigua mezquita árabe, siendo la torre neoclásica de la fachada lateral la parte más nueva del edificio (mitad del XVIII).
La fachada principal, de estilo gótico – plateresco, es obra de Alonso de Baena, actuando en el primer cuerpo Martín de Gainza y en el segundo Diego de Riaño.
El interior es de planta basilical; con tres naves de la misma altura separadas por pilares circulares decorados con baquetones que sostienen una grandiosa bóveda del más puro estilo gótico. La bóveda del ábside es abocinada de estilo renacentista.
En ella encontramos retablos barrocos realmente espectaculares.
Un par de imágenes curiosas de esta basílica. Por un lado, el modo de representar al Diablo, mordiendo la manzana del Pecado, que parece mas un asno que un demonio.
Y la postura de este santo mártir cuyo nombre no sabemos.
Horario de visitas:
Invierno: Lunes a viernes: 10.00 a 13.00 / 15.30 a 18.30
Verano: Lunes a viernes: 10.00 a 13.00 / 16.00 a 19.00
Sábados: 10.00 a 14.00
Precio de la entrada: 2 €.
En esta misma plaza encontramos el Castillo y el Ayuntamiento, casi superpuestos.
Castillo Ducal.
Fue alcázar militar durante la dominación árabe y su primera construcción es anterior al Siglo XI, si bien la planta actual responde a las reformas realizadas durante los Siglos XIV y XV. Tras la invasión cristiana se convirtió en residencia de los duques de Arcos.
Actualmente es una residencia privada y no está abierta al público (qué bien viven algunos)…
Ayuntamiento – Plaza del Cabildo.
El Ayuntamiento está situado en la plaza más emblemática de la ciudad, la del Cabildo, desde 1634. A destacar la portada de piedra coronada por el Arcángel San Miguel, patrono de la ciudad, el artesonado mudéjar y un cuadro de Carlos IV atribuido a Goya.
En un extremo de la plaza está el Mirador de la Peña Nueva que nos regala unas preciosas vistas de San Pedro en el tajo y el paisaje de los campos de cultivo.
Convento de las Mercedarias.
Se funda como convento de Mercedarias Descalzas en 1642 gracias a la donación de Dª Beatriz de la Calle. En su capilla, el altar mayor de estilo barroco, contiene la imagen de Ntra. Sra. de la Merced y otra del titular del retablo San José. Otra obra de arte que posee el Convento es un Niño Jesús de la Roldana.
En la antesala del convento, a través del torno, se pueden comprar dulces artesanos realizados por las monjas Mercedarias.
Antiguo Convento de los Jesuitas.
Situado en la plaza Boticas, se inicia la obra en 1759, pero unos años más tarde y, debido a la expulsión de los jesuitas de España durante el reinado de Carlos III, se dejó sin acabar. Hoy en día es la actual Plaza de abastos.
Pinacoteca.
Exponen cuadros de calles y paisajes de Arcos en su primera planta.
En la segunda planta hay un museo de elementos de las antiguas imprentas.
Merece la pena entrar a visitarlo.
Horario visitas: L-S de 10:00 a 13:30 y de 17:00 a 19:00 (invierno) / 18:00 a 20:00 (verano)
Martes, Jueves, Sábados tarde, Domingos y festivos: cerrado.
Jardín Andalusí.
Vimos sólo unas rejas. Os facilito los horarios que da la oficina de turismo, pero no los cumplen ya que estaba cerrado, y bien cerrado. Os aconsejo que preguntéis si podéis entrar a través del Palacio del Mayorazgo.
Horario visitas: L-S de 10:00 a 13:30 y de 17:00 a 19:00 (invierno) / 18:00 a 20:00 (verano).
Martes, Jueves, Sábados tarde, Domingos y festivos: cerrado.
Palacio del Mayorazgo.
Fue construido en el S. XVII y posee una hermosísima fachada de estilo herreriano compuesta por dos cuerpos: el primero con columnas de estilo toscano, y en la parte superior del segundo destaca un mirador con elementos mudéjares.
En el interior podemos ver los patios columnados. Es de entrada libre.
Capilla de la Misericordia.
Los marqueses de Cádiz fundan esta casa en 1490 como centro de acogida para niños abandonados y hospital de mujeres.
Destaca la zona del antiguo altar de estilo gótico.
Actualmente se usa como salón de conferencias.
Iglesia de San Pedro.
Su construcción data del S. XIV, sobre los restos de una antigua fortaleza árabe.
La fachada principal es de estilo barroco del S. XVIII con influencia de la escuela sevillana, obra de Manuel Gómez y Pedro de Silva. La puerta está flanqueada por cuatro columnas pareadas y sobre la cornisa aparece la imagen del santo titular de la iglesia.
Horario de visitas:
Lunes a viernes: de 9:00 a 14:00 y de 15.30 a 18:30.
Sábados: de 9:00 a 14:00.
Éste es el horario facilitado por la oficina de turismo, pero pasamos varias veces por delante y siempre estaba cerrada. Preguntamos a los vecinos y no nos supieron decir horario.
Ya es la hora de comer, así que nos disponemos a buscar sitio. Entramos en el Mesón don Fernando donde tienen un menú del día de 8.50 €.
De entrante nos ponen queso y aceitunas. De primero pedimos salmorejo y consomé con arroz, de segundo carrillada en salsa y patatas con huevo y chorizo, y de postre tarta al whisky y flan de vainilla. La comida no está mal, pero los postres no son caseros. Una opción económica para comer en pleno centro de Arcos.
Continuamos la visita y pasamos por el Mirador de los Abades donde podemos disfrutar del paisaje, de unas bonitas vistas de San Agustín y las rapaces que nos sobrevuelan.
Ahora nos dirigimos a la Iglesia de San Agustín.
Se funda como Convento de San Juan de Letrán en 1539, hasta que en 1586 es ocupado por los padres Agustinos de la Observancia llegando a adquirir cierta relevancia en la localidad (enseñaban Arte, Filosofía, Gramática, etc.).
Ya en el S. XIX comienza su decadencia, hasta que la desamortización les obliga a marcharse. Quedó sólo la iglesia, donde debemos prestar atención al Nazareno que goza del fervor popular de todo el pueblo. Recorre las calles la madrugada del Viernes Santo.
En esta iglesia también encontramos imágenes muy curiosas, como una María Magdalena con la cara de Cristo a todo color. Es una representación del Lienzo de la Verónica. El Lienzo de la Verónica es supuestamente una reliquia donde quedó impresa la cara de Jesús cuando ésta le limpió el sudor y la sangre mientras Jesús cargaba con la cruz.
También un ángel que no sabemos si le han empujado y está saltando al vacío (por la cara de miedo), o va a clavarle las banderillas a un toro (por la postura de los brazos).
Y por último una versión de Frodo (de la película El Jorobado de Notre Dame):
Horario de visitas:
Lunes a domingo: de 10:30 a 13:00 y de 15:30 a 18:30. Martes: cerrado.
Julio y Agosto: lunes a sábado de 10:30 a 13:00 y de 16:00 a 19:00. Domingos: cerrado.
Entrada: 2 €.
Visitaremos los dos últimos monumentos religiosos que nos quedan y para ello pasamos por el Mirador de Callejas, donde disfrutamos del tajo sobre el que está construido Arcos.
Junto a este mirador se encuentra la Puerta Matrera.
Fue clave en la defensa de la ciudad al oriente y es la única que subsiste del primitivo recinto amurallado de la localidad.
Está flanqueada por dos torreones del que sólo queda el de la izquierda (Torre de la Traición). Desde ella pueden observarse restos de muralla encajonados entre las casas.
Iglesia María Auxiliadora.
Convento de la Caridad.
Conjunto arquitectónico construido en la segunda mitad del siglo XVIII.
Volveremos sobre nuestros pasos para regresar al coche ya que la lluvia empieza a ser demasiado persistente, pero antes paramos en la oficina de turismo (que pasamos de largo antes por ir con prisa para ver los monumentos que cerraban a las 13:00), para visitarla por dentro. No tiene gran cosa, pero merece la pena entrar para ver una enorme maqueta de Arcos de la Frontera hecha con todo lujo de detalles.
Arcos, al ser tan grande, pierde el encanto de un pueblo tradicional, pero la cantidad de edificios bonitos que posee (entre ellos muchos antiguos palacios) lo convierte en un conjunto monumental imprescindible de visitar.
En él conviven edificios nuevos con restos romanos, como se ve en las columnas que aún conservan.
Y si paseamos por sus calles, descubriremos que los Arcos no forman parte sólo de su nombre, sino de la singularidad urbanística del propio pueblo.
Saliendo del pueblo, aprovechamos y vamos a un mirador para admirar este pueblo desde lejos. Vamos aquí: 36.739331,-5.796742.
Para ver más fotos, pinchar aquí.
Para descargar los planos de Arcos de la Frontera, pinchar aquí.
Fecha de las visitas: 21/03/2015
Si os ha gustado la entrada y os ha sido útil para organizar vuestro plan, agradecería mucho vuestra ayuda para el mantenimiento del blog.

Pues te recomiendo que entres en Wikipedia y veas una foto de la monja. Imaginatela sin habito y con un corte de pelo actual. A mi me parece guapa.
Ademas desde muy chiquetita ayudaba a los demás, cuando imagino no entendería aún si era guapa o fea.
En fin……….
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Hola Miguel Ángel:
Era simplemente una broma, obviamente si tiene una figura en la Iglesia es que tuvo que ser una gran mujer y especialmente piadosa. Solemos comentar detalles de las iglesias que nos resultan llamativos, pero siempre desde el respeto y sin intención de ofender a nadie. De todos modos, agradezco mucho tu aportación y he modificado la entrada en función de la nueva información obtenida en Google. Un saludo y gracias por seguirnos.
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Hola. Tan sólo quería comentar que la foto no corresponde a la iglesia de los jesuitas. De hecho, su templo quedó inacabado por la expulsión de la orden durante el reinado de Carlos III.
La imagen es la del Retablo Mayor de la Iglesia de San Francisco, lo único que resta del antiguo cenobio. Lo preside una talla de la Inmaculada, la patrona de los franciscanos.
Saludos.
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Buenos días Alvaro:
La iglesia de los jesuitas, según tenía entendido, no llegó a terminarse y hoy en día es sede del mercado del pueblo, que es lo comento en la entrada del blog.
En cuanto al retablo Mayor del que me hablas, no se a cual te refieres, ya que el que vimos, estaba presidido por la imagen de un cristo (https://megamineko.files.wordpress.com/2015/03/arcos-de-la-frontera-iglesia-san-francisco-27.jpg)
Un saludo y gracias por tu aportación.
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